Lic. Elizabeth Stump

pensamientos, reflexiones y vivencias.

lunes, 22 de marzo de 2010

Carta de un lector

TIENE EDAD EL AMOR?
Hace unos meses he conocido a un chico mucho más joven que yo del que me he enamorado. Yo tengo 38 años y él tiene 23. Yo siempre he creído que no hay que seguir a ciegas los dictámenes de la sociedad, que hay que mantener los valores propios y demás, pero me doy cuenta que tengo miedo del qué dirán, me da vergüenza de que me vean en público con él. Incluso me planteo dejarlo sólo por eso, pero temo cometer un error.

Parece que te encontraras frente a un problema de prioridades, que no tiene que ver con tu vida, ya que no estás dudando del amor que sientes por tu pareja, o de lo que él siente por ti, que en todo caso justificaría más que estuvieras pensando en dejarlo, sino con lo “que se espera de ti”. Cada persona tiene una escala de valores propia, que va construyendo a lo largo de su vida, lo que no significa que sea estática e inamovible. Cuando la persona se encuentra abierta a la posibilidad de cambios y posee cierta facilidad para adaptarse a situaciones nuevas, sabiendo tomar las experiencias como forma de aprendizaje y crecimiento, también se permite revisar su escala de valores haciéndola más flexible y acorde con lo que está viviendo. Tú me dices que crees que no hay que seguir a “ciegas” los dictámenes de la sociedad, lo que interpreto por: si, hay que seguirlos, pero sabiendo que sigues. Y probablemente ese sea hoy parte de tu conflicto. Que das por hecho que salir con una persona más joven que tú está mal visto por la sociedad, aunque no sepas por qué está mal. Y aquí entra lo que yo considero prioridades, y por ello me gustaría preguntarte: ¿qué es más importante para ti, lo que sientes por y con tu pareja, o lo que la gente pueda maliciosamente comentar? Cuando encuentres la respuesta, tendrás frente a ti la posibilidad de elegir a conciencia que consideras que es lo mejor y a que estás dispuesta a renunciar y por qué. Probablemente no te hayas puesto a pensar que si la mirada y el juicio de los demás es tan determinante para ti, pueda ser porque no estás lo suficientemente segura de ti misma y de tus valores y necesites de la aprobación de la sociedad para sentirte aceptada, aunque esto represente renunciar a la posibilidad de ser feliz. Si esto es así, terminar con tu relación no es la solución, ya que de una manera u otra, por el solo echo de vivir en una sociedad, siempre existirán situaciones en las que te sientas juzgada y te obliguen a optar sin tener en cuenta tu propio deseo. Te propongo que intentes ver más allá de ésta relación para descubrirte verdaderamente.

El que no ama siempre tiene razón: es lo único que tiene.
Antonio Gala

No hay comentarios:

Publicar un comentario